La salsa bechamel es una de las salsas básicas, se utilizan para preparar cientos de platos, desde unos canelones hasta unas verduritas, pasando por infinidad de acompañamientos. Es una salsa suave y delicada al paladar. Hoy vamos a prepararla de forma rápida y sencilla, para aquellas personas que no tienen tiempo o no tienen paciencia o ambas cosas.
INGREDIENTES
1/2 litro de leche.
30 gr de maicena.
Una pizca de nuez moscada,
1/2 cebolla picada finamente.
sal.
1 pizca de pimienta blanca.
2 cucharadas soperas de aceite de girasol.
ELABORACION
Comenzamos picando finamente la cebolla, también la podemos rallar en la mandolina o triturar con una batidora, eso va a gustos y la pochamos en el aceite. Hay quien pone mantequilla o margarina en lugar de aceite, como era mi madre, pero yo prefiero evitar las mantecas en la medida de lo posible.
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Cuando la tengamos pochadita vertemos sobre ella casi toda la leche, guardando como medio vaso, salpimentamos y echamos una pizca de nuez moscada.
Disolvemos la maicena en el medio vaso de leche que hemos reservado y cuando comience a hervir la leche, reducimos a fuego lento y vertemos poco a poco la leche con maicena, removiendo continuamente con una cuchara de madera. (en caso de que queramos la salsa más espesa es cuestión de poner más cantidad de maicena).
Dejamos espesar a nuestro gusto, sin dejar de remover y ya tenemos una sencilla y rápida salsa bechamel que nos sacará de más de un apuro.
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